“La paz les dejo; mí paz les doy. Yo no se la doy a ustedes como la da el mundo. No se angustíen ní se acobarden.”

Paz es más que la ausencia de grandes confusiones o de Guerra. Por medio del Espíritu Santo, tenemos la seguridad de la paz como una fuerza positiva. Nuestra fe nos permite usar esta fuerza para renovarnos y transformarnos, también para compartir esta paz por todo el mundo.

DIOS PODEROSO: RENUÉVANOS POR EL PODER DE TU ESPÍRITU SANTO. AYÚDANOS A RECIBIR LA PAZ QUE TÚ NOS DAS. CON TODA LA CONVICCIÓN Y LA FORTALEZA QUE VIENEN DE LA FE, AYÚDANOS A MIRAR A NUESTROS VECINOS PARA DECIRLES:” LA PAZ DE DIOS ESTÁ CONTIGO.” AYÚDANOS A QUE NUESTRAS PALABRAS Y ACCIONES MUESTREN AL MUNDO QUE HEMOS PEDIDO AL ESPÍRITU SANTO QUE DE PAZ A TODAS LAS PERSONAS. AMÉN.

-Don Shatto