“Cíertamente les aseguro que mí Padre les dará todo lo que pídan en mí nombre”

Los cristianos han depositado su confi anza en Cristo como Señor y Salvador. Jesús responde a esta fe con la promesa de escucharlos. La confi anza no está en las buenas obras humanas. La confi anza es que Jesucristo murió por los pecados que nos separan de Dios. Jesús nos acercó al Padre para dejar de ser huérfanos. Si tiene alguna necesidad o deseo de corazón puede unirse con otros y dar gracias a Dios por la oportunidad de pedir y de recibir. Hay gozo en el cielo y en la tierra cuando las peticiones son respondidas y disfrutadas para exaltar a nuestro buen Dios.

AMADO PADRE CELESTIAL: CREO QUE JESUCRISTO MURiÓ PARA PERDONAR MIS PECADOS. TÚ ERES SUPER-PODEROSO PARA PROVEER TODO LO QUE CADA UNO NECESITA. ESTOY LISTA PARA COMPARTIR LOS MILAGROS QUE TÚ HACES EN MI VIDA; EN EL NOMBRE DE JESÚS. AMÉN.

- Rev. Gloria Villa-Díaz