“Cíertamente les aseguro que mí Padre les dará todo lo que pídan en mí nombre”

Una evidencia de que nuestra fe esta puesta en Jesucristo es el testimonio de ser escuchados por Dios. Sus respuestas son garantía del cumplimiento de sus promesas. Jesús es el garante de que nuestras peticiones son escuchadas. Dios es Padre Nuestro y también nuestro proveedor. Ejerzamos la sana costumbre de comunicarnos con nuestro Padre amado, diariamente.

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AMADO PADRE CELESTIAL: TE ALABAMOS PORQUE EN TU ETERNA GRANDEZA Y BONDAD, ESCUCHAS NUESTRAS PLEGARIAS. PROCLAMAMOS QUE JESUCRISTO ES EL SALVADOR DE NUESTRAS VIDAS.

TÚ ERES PODEROSO PARA SUPLIR TODAS NUESTRAS NECESIDADES Y PARA AYUDARNOS A PERMANECER EN COMUNIÓN CONTIGO Y CON OTROS.

PADRE NUESTRO: GRACIAS POR BENDECIRME Y PROVEERME PARA MIS NECECIDADES. BENDICE A LOS QUE COMPARTEN SUS BENDICIONES CON OTROS Y CON LA IGLESIA. AMÉN.

-Rev. Gloria Villa-Díaz