“Así mísmo, en nuestra debílídad el Espírítu acude a ayudarnos. No sabemos qué pedír, pero el Espírítu mísmo íntercede por nosotros con gemídos que no pueden expresarse con palabras.”

Dios nos guía durante la oración. El Espíritu Santo viene a “soplarnos” y a decirnos lo que hay en el corazón de Dios mismo. Aunque nuestras peticiones no sean claras o no sepamos que pedir, el Espíritu Santo nos guía en la oración y nos sostiene junto con sus peticiones delante de la presencia de Dios. El Espíritu Santo si sabe cual es la voluntad de Dios para con nosotros y que peticiones deben hacerse.

AMADO DIOS ETERNO: CON TU SALVACIÓN RECIBIMOS EL REGALO DEL ESPÍRITU SANTO. GRACIAS PORQUE NO ESTAMOS SOLOS DURANTE NUESTROS TIEMPOS DE ORACiÓN E INTERCESiÓN. TE ADORAMOS A TI ESPíRITU SANTO POR INTERCEDER A FAVOR NUESTRO, A FAVOR DE LA HUMANIDAD Y DE TODA LA CREACIÓN. AMÉN.

-Harry Jo Fisher