“Pero a cada uno de nosotros se nos ha dado gracía en la medída en que Cristo ha repartído los dones.”

Recuerdo haber escuchado un mensaje sobre la gracia. El predicador hizo la siguiente afi rmación: “Gracia no es el nombre de una vecina.” Cuan maravilloso es el concepto de la gracia. Es dada gratuitamente a cada uno, no podemos ganarla, no podemos comprarla, no podemos cambiarla por todo lo que tenemos. Todo lo que podemos hacer es aceptarla y agradecerle a Dios por ella. ¿Quién de nosotros puede medir la magnitud de este regalo de Cristo para nosotros? ¡Gracias a Dios por amarnos tanto!

AMADO PADRE: ¡TÚ ERES UN DIOS EXTRAORDINARIO! GRACIAS POR EL REGALO DE TU PRECIOSO HIJO, Y POR EL REGALO QUE ÉL NOS DIO A CADA UNO DE NOSOTROS. PERMíTENOS ESFORZARNOS PARA VALORAR DE TU REGALO. AMÉN.

-Nancy Cousar